"Es un cobarde" dice Rocío, "cuando las cosas están mal, se tiene que quedar y bancarsela, como hago yo, no puede escaparse y dejar todo así". Yo la miro y le digo que la entiendo, sé de que me habla. La veo enojada, triste, frustrada. Dice que siempre es lo mismo, pero no le importa seguir intentándolo hasta que funcione, porque aún así, "es amor". Al rato la veo riendo y me alegra que tenga esa facilidad de poder hablar con el corazón roto y reírse como si estuviera todo bien. 
Ariadna dice estar bien así, dice que no lo necesita pero él simplemente aparece y no puede decirle que no, es más fuerte que ella. Yo pienso que cuando dos personas se aman es casi imposible manterse separados, entonces le explico que esta bien, que si ella es feliz cuando están juntos, entonces esta bien. "Pero después se va, y ya no estoy bien" y puedo notarlo en sus ojos, que cuando esta triste o paso toda la noche llorando es inevitable darse cuenta. 
Yo creo que Tamara esta obsesionada, habla de la misma persona todo el día, y sufre, sufre mucho. Yo me enojo, le digo que me tiene harta hablando siempre de lo mismo, que necesita despegar y hacer su vida, sin estar tan pendiente. Tamara expresa y demuestra exactamente todo lo que siente, lo que en muchas ocasiones envidio, porque yo no puedo ir por la vida contando y/o demostrando cada cosa que me pasa. Me enojo conmigo misma por no poder hacer nada para ayudarla, pero ella siempre responde "yo soy así, y estoy bien así".
Sebastian es parecido a Tamara, pero más tranquilo. También habla de la misma persona todo el tiempo que puede, no estoy de acuerdo con que haya dejado a la novia porque "salía mucho a bailar" porque creo que no quiere ver el verdadero motivo por el cual se separaron. Aún así tampoco la suelta, y eso me parece egoísta, dejarla pero no dejarla. Irte pero quedarte. Quedarte pero irte. 
Después de todo, yo soy de palo. No puedo hacer más que sentarme, escuchar e intentar aconsejar.
Y yo, siempre estoy recalcando que si es amor, entonces me quedo. Entonces acá estoy. "Es más fuerte que todo, y cuando estamos bien, lo vale todo" ellos responden que si, que puede que tenga razón. Y creo que es la razón por la que todos seguimos acá, luchando por lo que uno quiere, por lo que uno siente. O por lo menos, intentándolo. 
Todos tenemos distintas ideas del amor, pero a la vez, todos estamos unidos por la misma. 
Salgo al balcón, tiro una manta al piso y me siento, me tapo con una campera de mi ex, pongo los redondos y me prendo un pucho. Solo busco sentirme cómoda, encontrar mi espacio y pasar tiempo conmigo misma. Pero no lo consigo, algo me molesta, no logro descubrir si es mi pelo ¿me lo ato o lo dejo suelto? o capaz las pantuflas, que al estar sentada como india, quedan aplastadas. O bueno, quizás es el balcón, pero en mi habitación tampoco me siento cómoda. No lo encuentro, no puedo encontrar mi lugar, ese lugar en el que estas a salvo de todo mal, en el que te tiras a estar solo y nadie te molesta. Pienso que en realidad, puede ser mi cuerpo. Me gustaría poder escapar de él, salir corriendo y no estar más adentro mio. ¿Puede ser eso? estar encerrada en un mismo envase por 18 años, un envase en el cual nunca pude sentirme a gusto. Y hoy más que nada estoy buscando eso, sentirme cómoda, poder sentarme y decir "si, así y acá estoy bien". Me pregunto si algún día podré decirlo, o si simplemente, podré escapar. 
Bajo del colectivo, me prendo un pucho y camino una cuadra y media hasta el mismo banco de siempre, a veces suele estar ocupado por alguna parejita y entonces me siento en el árbol. Nuestro árbol. 
Desde donde estoy puedo ver a una pareja, un chico acostado en el pasto, y ella, con el uniforme del colegio, sentada al lado de él. No le importa tirarse encima de su chico y que se le suba la pollera, no le importa si alguien la mira o no. Ella lo abraza y lo llena de besos. Me causan ternura. 
Mientras tanto, otra pareja se besa en el banco más cercano al mio. Yo sigo acá, sola. Me levanto, camino un rato y veo una chica sentada en el pasto, armándose un porro. La misma que me cruce hace unos días, en el mismo lugar, pero tomando mates. Creo que me cae bien. 
Me voy a caminar a otro lado, me voy a fumar donde haya menos gente, donde me da el solcito y puedo estar en paz, sola. 
Y pienso en cuantas veces estuve acá, en cuantas veces estuve esperándote, cuantas veces te habré cruzado (¿casualidad?), cuantas veces te vi llegar y cuantas veces estuvimos llenándonos de besos como aquella parejita. Pienso en todas las veces que lloré por vos, en todas las veces que me mentiste y en como sigo esperando algo de vos. Y entonces me doy cuenta, esa era yo, yo a los 15 años, yo a los 16, yo a los 17. Y acá estoy, yo a los 18 años. Decido romper con todo esto, darle fin. No buscarte más, no esperarte más. Decido dejar a esa nena que sufría por vos, que solo esperaba verte llegar, que te acerques y compartas el lugar conmigo.
Vuelvo, me siento un rato más y me despido. 
Que sea lo que tenga que ser, me voy.
Me pregunto si algún día voy a dejar de sentir esto, si voy a dejar de extrañarte o de esperarte sentada en la plaza. De recorrer lugares en los que pienso que podes estar, solo para verte, aunque sea un rato. Y saludarte, y quien te dice, hablar un rato, saber como estas, que haces, si me extrañas o ya no te acordas de mi. 
Odio no saber, y eso lo sabes perfectamente. Sabes muchas cosas de mi, que me gusta y que no. Creo que sabes como voy a reaccionar frente a tales situaciones antes de que pasen, o antes de que digas algo. Aunque, muchas veces, pareces sorprendido. Con vos, nunca se sabe. Sos impredecible y a la vez tan obvio. 
Hoy te busqué, en otro momento te hubiera encontrado tan fácilmente, mientras que hoy, no supe de vos. Supongo que ya no vas por nuestra plaza, que ya hay rincones por los cuales no debes pasar, o no te deben interesar. Debes tener cosas más importantes, es entendible. 
Me gustaría que me busques, me gustaria que me encuentres. Encontrarte. Cruzarte, por ahí y que todo vuelva a empezar.
Balas de magia disparaste acá. Cuando creí que ya no sentía lo mismo, algo se prendió en mi, no me equivoqué. No sentía lo mismo. A decir verdad, siempre sentí algo por vos, creo que es casi imposible no hacerlo. Pero también, creo que siempre fue distinto. Me habré escuchado a mi misma cientos de veces diciendo(te) "siempre es lo mismo, la historia se repite" y quizá, no este tan errada, puede que siempre terminemos cayendo en lo mismo, pero siempre encuentro algo nuevo, algún sentimiento, algún pasatiempo, algún lunar o algún rulo que hace que vuelva al punto de partida (y no me quiera ir). Debo admitir que siempre me costó dar el primer paso, decirte lo que siento, porque siempre esperaba que lo hagas vos, para asegurarme de que el sentimiento era mutuo. Pero, porque esta vez debería esperar a que lo hagas vos? Cambié eso, lo sentí y te lo dije. Te confesé lo mucho que me gustas, lo bien que la paso con vos y lo mal que me haces. Te dije que no quiero que estés con otras chicas, pero que tampoco te lo voy a prohibir, pero si tu elección era hacerlo, no cuentes conmigo, porque me duele. Me doles. Me di cuenta que nadie me parecía tan interesante como vos, a pesar de conocerte en todos los aspectos posibles siempre encontré algo que me sorprendió, porque a la vez, siento que no te conozco lo suficiente (ni vos a mi). Acaso 4 años no son suficientes? podría estar toda una vida que para mi, no bastaría. 
Aún así, te mostraste indiferente. "Yo estoy bien así" respondiste. Y no logré entender a que te referías, no te explicaste ni hablaste de tus sentimientos, esperaba emoción, quizá alguna pelea que termine a los besos o algún discurso tuyo. Pero no hablaste mucho, aunque explicaste que solo estabas conmigo, y eso te parecía bien. A mi, no me era suficiente. 
Yo sé que esta mal esperar que la otra persona reaccione como uno quiere, pero no puedo evitarlo. Hace días esperaba que decidieras dejar todo por mi, que te arriesgues y no te despegues de mi lado. Que si es posible, me abraces toda la noche, y porque no todo el día? que no te importe el que dirán, que me lleves acá y allá, que me acompañes y acompañarte. Lo idealice, lo sé. Pensaba que no lo hacías por no saber que me pasaba a mi, y fue así que decidí contártelo. Pero a vos, pareció no moverte un pelo. Pienso que te lo habrás tomado como algo natural, acostumbrado a que yo sienta algo por vos, a que yo este ahí para cuando me necesitas, a que todo sea tan "igual". Pero para mi, siempre fue distinto
No busco ninguna excusa, no es porque "hoy es 3", no es porque te pedí que no vuelvas a hablarme y busco alguna manera de que lo hagas, tampoco es porque daría lo que fuera por estar durmiendo en tus brazos. Es simplemente porque lo siento, y no tengo miedo de decirlo. 

https://www.youtube.com/watch?v=99aFYA1nVc4
21 de mayo del 2016 me agarrabas de la mano cuando me veías caminar por el boliche y me llevabas hacia vos, no recuerdo que me dijiste pero si que nos besamos. Para ese entonces yo estaba por cumplir 17 años y vos 22. Fue solo eso, me pediste mi facebook y me pareció algo estúpido ya que podrías haberme pedido el numero, pero aún así te lo pase. Me agregaste al instante, yo me fui, no me habías llamado la atención y si mal no recuerdo, me volviste a agarrar en un momento de la noche, pero te dije que me tenia que ir, después de darte un beso. 
Al otro día me hablaste, termine pasándote mi número y hablamos bastantes veces, pero nunca volvió a pasar nada entre nosotros. Vos me contabas de tus chicas y yo de mi historia con mi pareja para ese entonces. Muchas veces dijimos de vernos pero por una cosa u otra, nunca lo hacíamos. 
Para marzo de 2017 yo había cortado con mi novio y vos estabas terminando con una chica, lo hablamos y nos consolamos mutuamente. "En estos días nos juntamos a tomar una birra?" y así fue. Fuimos sin intenciones de nada (o por lo menos yo), me parecías un pibe muy lindo pero no terminabas de llamar mi atención, hasta ese día. Me esperaste en Temperley con tu auto y de ahí fuimos a comprar birras, me mostraste la plaza de tu barrio y ahí paramos. Hablabas mucho, más que nada de tus amigos, me hubiera gustado que me hables de vos o me preguntes por mi, pero me gustaba el amor que les tenías entonces me senté a escucharte. Fumamos y cuando se nos terminaron las 4 cervezas fuimos a comprar dos más. Me gustó que no te importe el horario, que te guste tanto la cerveza como a mi, que hables tanto que nunca hubo momentos incómodos, que no pretendas nada de mi. No fui consciente de la hora y debo admitir que estaba ebria y drogada, pero tampoco me importo. Me llevaste hasta mi casa y antes de bajarme del auto nos saludamos con un beso en los labios, como si supiéramos que iba a pasar eso. Pero yo, no tenia idea. Solo salió. "Cuídate, y avisame cuando llegues" te pedí y entre a mi casa como pude. 
Al otro día me dijiste que yo te gustaba y no lo entendí, pensé "como le puedo gustar ya? tan rápido?" pero no le di vueltas, tampoco te lo pregunte, porque admito que me pareció lindo que me lo digas.

Domingo

Salí de trabajar a las 5 y pico de la tarde y espere que una compañera me pase a buscar, cuando llego a eso de las 6 fuimos a sentarnos en frente del obelisco y charlar un rato. Le pregunté por el ex, ya que hace poco habían cortado y ella empezó a hablar. Me gustaba lo que me decía, me gustaba que reconozca sus errores y que intente explicarme todo el amor que hay entre ellos, yo le dije que la entiendo y automáticamente pensé en vos. "Si, te entiendo, me pasa lo mismo". Tamara dice que le duele mucho que este por llegar su cumpleaños y que no este él para compartirlo, tiene miedo que el no la salude, que no le mande ni un mensaje. Quiero contarle que a mi también me duele que vos no estés para pasar todo el día conmigo, que sé que me vas a mandar un mensaje pero que no me alcanza con eso, pero dejo que siga hablando. 
No puedo evitar que sigas en mi mente, ya te empecé a extrañar, quiero hablarte... A las 8 de la noche me tomo el colectivo para volver a mi casa. Es sábado y solo pienso en vos, entonces te mando un mensaje, no me voy a quedar con las ganas. No tardas mucho en contestar, charlamos de como estamos, te pregunto si estas nervioso por la competencia que se viene mañana y sé que si. El colectivo pasa a una cuadra de tu casa, como siempre, miro por la ventana buscándote, pero nunca te veo. Cuando llego a mi casa me siento en la alfombra de mi pieza, al lado de la estufa, como de costumbre. Y no lo pienso, simplemente se me llenan los ojos de lagrimas y se me hace imposible contenerlas, así que lloro, lloro con tristeza sin saber porqué. Nosotros seguimos hablando pero te trato más cortante, sin darme cuenta, y te das cuenta que algo pasa. Entonces te explico, estoy triste, nada más, como si no fuera importante. Te digo que en otro momento hablamos pero me decís de vernos, cancelas tus planes y me invitas a tu casa. "Sos bueno cuando queres" te respondo, y la verdad es que, tengo muchas ganas de estar con vos...
A las 12 de la noche me pasa a buscar mi papá y me lleva a tu casa, me subo al auto y otra vez esa sensación, esas lagrimas en los ojos que esta vez si puedo guardar. Quiero llegar y que me estés esperando en la puerta, que me abraces fuerte y no me sueltes, pero no estas. Te mando un mensaje y bajas a abrirme. "Subí" me decís siempre, pero yo prefiero esperarte, que cierres la puerta y pases primero. 
Quiero abrazarte, así que cuando estamos en tu habitación lo hago y vos, mientras me devolves el abrazo, me acaricias. Gracias por besarme como antes, gracias por besarme tanto, gracias por hacerme olvidar que estaba triste. 
Pero entonces me preguntas "que te pasaba?" y otra vez, intento contarte porque pienso que estoy triste (porque no estoy del todo segura el motivo). Me secas las lagrimas, me pedís que me acueste con vos y ya estoy bien, sos mágico. 
Me llena de amor que me despiertes a los besos y odio que te vayas de la cama y me dejes sola. Pero volves, y con un par de besos y que me digas "amor" se me pasa el enojo, traes el mate a la cama y desayunamos mientras escuchamos música, quiero hacer esto todos los días. Y más si estas así de contento como hoy, que cantas y bailas porque estas ansioso por la competencia (como me gustaría poder frenar el tiempo, en el preciso instante que sos feliz). 
Vamos a esperar el colectivo y debo admitir que esperaba que me invites, que me pidas que te acompañe, pero no lo hiciste. 
Prefiero quedarme con lo bien que la paso con vos y no escribir sobre nuestra discusión, sobre lo que sentí cuando vi que te ibas con tu amiga y no conmigo, prefiero pensar en cuando voy a volver a verte. Porque ahora, domingo 22:48 pm, no paro de pensarte, te extraño y esta es mi manera de comunicarme con vos.

25/03/17

"Te amo, no puedo dejar de hacerlo. Y te extraño, un montón" quise decirte, pero me lo aguante toda la noche. 
Te miro, estas contento. Sos tan lindo cuando bailas, cuando fumas, cuando me miras. Me pasas el porro y quiero agarrarte la mano, y decirte "si me soltas, perdes" te acordas? sé que no te gusta perder, y a mi menos. Me conformo y fumo, estoy tranquila. Yo también estoy contenta. Dude en mucho en venir, pero Rels me gusta bastante desde que me lo mostraste, ya había comprado las entradas y tenia muchas ganas de compartir esto con vos. Que más da? voy, pensé, y que sea lo que tenga que ser. Creo que fue una buena decisión, porque estoy cómoda. Bueno, ahora, porque cuando sacaste el celular y te pusiste a hablar con una chica, quiero decirte que me rompiste el corazón. Era necesario hacerlo al lado mio? o hacerlo, directamente. Yo no puedo, sabes? o si, pero no quiero. No me interesa hablarme con algún pibe, no lo necesito. En cambio vos, parece que si. No te aguantas estar solo, y mira que a mi no me gusta eh, y si, lo sufro un montón. Pero si no sos vos, que no sea nadie.
Cuando pasamos por constitución mire tu mano en busca de nuestro anillo, pero no lo tenías. Me duele pensar que no significa nada para vos, que te lo sacaste apenas decidiste cortar conmigo. Me lo saqué disimuladamente mientas vos hablabas y lo metí en la cartera, no quería sentirme una idiota cuando lo veas. Aunque creo que ni prestaste atención a eso.
"Que queres tomar?" me preguntas, y como siempre, no sé. Campari, decidimos. Tomo rápido y bastante, "te queres poner en pedo para olvidarte lo que vas a hacer conmigo?" no estamos haciendo nada, te respondo. Y entonces me besas, y pienso que no, no me quiero olvidar de esto. Al contrario, imposible olvidarlo. Extrañaba tus labios, tu forma de besarme, de agarrarme por la cintura, de tu sonrisa a mitad del beso. 
Cuando veníamos me dijiste que no flashee, que no piense que íbamos a ser novios por una noche, íbamos a un recital nada más. Y no lo pensé, para nada. Pero me dolió que digas eso, como si no te interesara estar conmigo. 
Voy al baño para seguir armando mientras vos me esperas en las escaleras, hago lo mismo cuando te toca a vos, pero antes me decís "ojo eh, que hasta que te vayas sos mía, por esta noche" o algo así, no logro entenderte del todo, queres o no queres algo conmigo? soy una piba de una noche y listo? pero no era que no tenia que flashear? pero decido dejar de pensar tanto, y que pase lo que tenga que pasar. Cuando volves seguimos fumando, mientras tanto arranca Rels B. Me ceba bastante el lugar, la música, la gente, vos. Podría hacer esto más seguido. De vez en cuando nos damos uno que otro beso, me cuesta ser yo la que lo arranca, no quiero que me rechaces, o pienses cualquiera de mi. Pero me pone contenta que lo hagas. Me pregunto que estarás sintiendo, si te gusta que este al lado tuyo, o si te da igual. Otra vez pensando, vamos a tomar algo. Fernet para vos, birra para mi. Nos fumamos dos porros más y puedo ver como la locura nos invade. No me importa, sigo tranquila. La estoy pasando bien, y parece que vos también. Termina el show, y no quiero que termine la noche, no quiero despegarme de vos. Sé a donde vamos, sé que queres, y no lo niego, también lo quiero. Pero antes, parada al mc, el famoso bajón, no? no hablamos mucho, pero no me parece incomodo. "No tenemos nada de que hablar" me decís después, refiriéndote a nosotros. Te entiendo, esto no es nada más que una salida y punto. Que pase y ya, no tiene porque cambiar en algo, no? esta bien, te digo. Como si pensara lo mismo, como si no me cambiara en nada. "Seguimos?" si, seguimos. Y vamos hasta donde nos indica el mapa. Es la primera vez que vamos a un lugar así, no estoy nerviosa, no me siento rara, no me molesta. Estoy cómoda. Es una habitación bastante linda, y sabemos como vamos a terminar. Los dos desnudos, besándonos, cogiendo. Quiero poder decir que estamos haciendo el amor, pero ¿es amor? no tengo idea que pasa por tu mente, o por tu corazón. Terminamos abrazados y me quedo dormida en tu pecho. Realmente no quiero que termine la noche, tengo sueño, estoy cansada, estoy bien acá, con vos. Nos quedamos un rato más. Nos dormimos juntos, y me doy cuenta lo mucho que extraño esto. "Te amo, no puedo dejar de hacerlo. Y te extraño, un montón" no te lo digo, no quiero arruinar este momento. ¿Y si no sentís lo mismo? ¿y si lo digo y me ignoras? ¿si te enojas porque no tengo que flashear nada? que se yo boludo, perdoname, pero no puedo frenar mis sentimientos. 
Nos despertamos cuando suena la alarma. Nos tenemos que ir en un rato, pero antes, vuelven los besos y tus manos, que parecen estar por todos lados. Quiero frenarte, que me mires a los ojos y me digas que te pasa conmigo. Pero otra vez, no voy a arruinar esto. Nos vestimos y nos vamos. Ya se termina la noche, nos subimos al colectivo y me duermo arriba tuyo. Cuando bajamos me preguntas si quiero ir a desayunar algo, no tengo hambre, pero quiero estar con vos. Entonces te digo que quiero un café, porque tengo frío. Y desayunamos juntos. Me decís algo así como que, cuando lleguemos, nos vamos a dormir, como si fuera una salida normal, yo durmiendo con vos en tu casa. Pero parece que te das cuenta de lo que dijiste y me contas que no podes ir a tu casa, así que me acompañas a la mía. No me niego y aprovecho cada momento juntos. 
Llega el momento de la despedida, otra vez. No sé si darte un beso en los labios, abrazarte o solo dejar que te vayas. Me chocas la mano y me siento una estúpida, "así me vas a saludar?" te pregunto, realmente enojada. Después de todos los besos te ibas a despedir así? "no, solo quería chocarte la mano" dándote cuenta de tu error, y me besas. Y no quiero que se termine. Pero ya te tenes que ir, y yo también. Gracias por esta noche, la pase muy bien. Te amo, no puedo dejar de hacerlo. Y te extraño, un montón.
Me cuesta mucho despedirme, de vos, de mi, de nosotros. Nunca pude hacerlo, nunca tuve esa intención. 
No me quiero despedir. ¿Como se hace? ¿como haces vos? ¿ya te despediste de mi?
Para mi, despedirse, es no verse nunca más. No volver a tener contacto. Y no sé si quiero eso. (No, no quiero.) Por eso nunca lo hice, tantas veces decidimos alejarnos, pero jamás pude despedirme. Pero, ¿vos que crees? ¿ya es hora de hacerlo? ¿nos despedimos? ya te dije, no quiero eso pero ¿y si nunca lo hacemos? ¿y si es lo que necesitamos para despegar? pero también pasa qué ¿y si nos perdemos de muchas cosas lindas por hacerlo? 
A veces no sé si ponerle llave a la puerta, cambiar la cerradura y no dejarte entrar o simplemente dejarla abierta, quizá simulando estar cerrada, pero sin llave, que tengas la posibilidad de pasar cuando estes dispuesto a acomodarte y no irte más. 
Es que también me da terror la idea de que entre otra persona, mira si roba todo lo que es tuyo (¿o lo que era?). Mira si me deja peor de lo que me dejaste vos, con un quilombo peor de el que hay (¿es eso posible?).
Entonces ¿crees que existe la posibilidad de una visita sorpresa? de esas visitas que, duran toda una vida quizás. Exageradamente, claro. Y no hablo de ahora, de mañana o pasado. Pero ¿lo crees? ¿o preferis la despedida? y nos dejamos de joder y terminamos con todo esto como se debe. 
Y si me preguntas a mi, no sé. No me quiero despedir, pero no se que hacer con la llave. ¿La queres o la cambio?
Escribo y borro, nada me convence
pero todo lo que escribo
lo escribo para vos
tengo tantas cosas que decir
que todas se mezclan
y a la vez
creo haber dicho todo
también pienso "para que?"
"que va a cambiar?"
nada
pero igual
quiero hablarte
quiero escribirte
y quiero que me hables
que me respondas
me siento una tarada
por estar acá
acostada
un viernes a la noche
tomando una cerveza
y escribiéndote
mientras vos
anda a saber qué...
pero
soy así
podría haber salido
podría estar con algún pibe
y no, no quiero
no me sale
lamentablemente
todavía te quiero.